La publicación Atlas de la PAC. Hechos y cifras sobre la Política Agrícola Común analiza esta política, explicando sus bases, cómo se dan las ayudas y cómo repercute en nuestras vidas. Esta publicación es un proyecto de la Fundación Heinrich-Böll (Alemania) y SEO/ BirdLife para la Coalición Por Otra PAC.
Actualmente existe una falta de relevo generacional en el sector agrario, existe una degradación de los recursos naturales y se están dando problemas de salud derivados de la alimentación. Cuestiones como estas son las que, según el texto, nos muestran que la PAC actual no funciona.
La PAC cuenta con casi un 40% de los fondos de la Unión Europea, es decir, unos 60.000 millones de euros anuales, siendo una de las políticas más desconocidas por la ciudadanía. Se basa en dos pilares: El primero cubre pagos, principalmente, que se asocian al tamaño que tienen las explotaciones. El segundo pone el foco en aspectos del desarrollo rural, producción ecológica y medidas para proteger el medio ambiente.
Esta PAC no está adaptada a una agricultura tan diversa como la europea. Un conjunto de normas obliga a las pequeñas explotaciones agrarias del sur de Europa a medirse con las grandes explotaciones mecanizadas del norte. El 70% del presupuesto se destina a pagos por hectáreas, es decir los agricultores que tienen mucha tierra reciben mucho dinero. Los pagos vinculados a la superficie benefician a las grandes explotaciones más productivas y los objetivos de la mitigación y adaptación al cambio climático, el desarrollo rural y la protección del medio ambiente tienen una menor atención.
Actualmente la PAC no puede cumplir los compromisos políticos establecidos internacionalmente en relación al cambio climático y la justicia global, como los Objetivos de Desarrollo Sostenible. Además el bienestar animal recibe pocos fondos de la UE.
En 10 años, del 2003 al 2013, un tercio de los agricultores finalizaron su actividad. Esto ha significado que un 3,1 % de explotaciones agrícolas manejen más de la mitad de la superficie agraria.
En el año 2021 entrará en vigor un nuevo período presupuestario para la PAC (2021-2027) y las negociaciones sobre ella ya han comenzado. Es el momento y la oportunidad para mejorar esta política. Una política que se dirija hacia sistemas alimentarios sostenibles, que dé valor a los productores y consumidores y que promueva un producción sostenible, sin malgasto de alimentos y un consumo saludable.
Esta transformación necesita que se mejore la participación pública en el diseño de políticas y reforzar el papel de la sociedad civil. De esta idea nació en España la Coalición Por Otra PAC, una alianza de 37 entidades (asociaciones de productores ecológicos, ganaderos extensivos, organizaciones de cooperación al desarrollo, de nutrición, ambientalistas, de consumidores y empresas) que a través de incidencia política pretende lograr una nueva PAC.
Esta nueva PAC necesita acciones plurales y coordinadas. Para conseguirlo, el 14 de mayo se presentará este documento en Bruselas, donde se espera que tenga un gran impacto entre los responsables del desarrollo de la futura PAC.