En estos días de junio está teniendo lugar la cumbre de los ministros de Agricultura del G20 en China. Afrontan el reto de garantizar el abastecimiento alimentario a la creciente población mundial, siempre defendiendo el respeto el medio ambiente. Debemos recordar que la eliminación del hambre, la malnutrición y la extrema pobreza es uno de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y que, por ello, se están desarrollando distintas fórmulas para alcanzarlo. En China, el Director General de IFPRI, Shenggen Fan, explicó la necesidad de aplicar tanto innovaciones tecnológicas como el compromiso de renovar políticas e instituciones que incentiven el desarrollo sostenible.
Fan resaltó que retos como el crecimiento de población y urbanización son causantes de un incremento en el riesgo de inseguridad alimentaria y de problemas medioambientales. Por ello, el director de IFPRI defiende la necesidad de aumentar la producción de alimentos de forma sostenible incorporando tanto nuevas tecnologías como innovaciones en las prácticas de cultivo. Además, destaca la importancia de estimular la disminución de desperdicio alimentario que tiene en lugar tanto en países desarrollados como en desarrollo. En los primeros resalta la importancia de la educación y en los países en desarrollo incentivar una mejora en las tecnologías que permitan una buena conservación de los alimentos.
Para ejemplificar las medidas que este defiende, Fan habló del proyecto que FAO e IFPRI expusieron el pasado Diciembre en la cumbre de Turquía. Se trata de la incorporación de una nueva herramienta destinada a la medición y la monitorización del desperdicio alimentario. Esta herramienta pretende identificar grupos en riesgo y deficiencias en las políticas y el desarrollo de cada país. El director de IFPRI apela a la responsabilidad tanto de los miembros del G20 como del resto de los estados comprometidos con los ODS, de buscar fórmulas para promover la mejora del sistema global de alimentación.