Uno de los temas destacados de la reunión celebrada en Japón y a la que han asistido representantes de los ocho países más ricos del mundo ha sido la generación de energía limpia.El G8 (los ocho países más industrializados del mundo) colaborará entre sí y con los países en desarrollo para luchar contra los desafíos globales tales como el cambio climático y el desarrollo de tecnologías sostenibles, según el acuerdo alcanzado por representantes de estas naciones en Nago (Okinawa, Japón).
"Hemos organizado el primer encuentro ministerial (del G8) en el campo de Ciencia y Tecnología, que es muy importante para resolver las cuestiones globales, y hemos sido capaces de llegar a acuerdos", aseguró el ministro de Ciencia y Tecnología nipón, Fumio Kishida, que presidía la cumbre. La generación de energía limpia ha sido uno de los temas más importantes de la reunión, en la que se ha destacado la necesidad de promover el desarrollo de una nueva generación de tecnologías para la fabricación de los biocombustibles del futuro. Los ministros han aludido así a la utilización de materiales "no comestibles" para prevenir la posible escasez de alimentos, según Kishida.
Los representantes del G8 han subrayado la importancia de la innovación tecnológica hacia una sociedad de bajas emisiones de carbono, explicó el ministro japonés. Además, los ministros han acordado reforzar en sus países la investigación y el desarrollo de las tecnologías capaces de generar energías más limpias y compartir más información al respecto entre ellos. También se han comprometido a compartir sus avances en el campo de la ciencia y la tecnología con los países en desarrollo, especialmente con los africanos. Asimismo, los países más industrializados han decidido que reforzarán su cooperación internacional para así compartir grandes instalaciones en las que promoverán la investigación y el desarrollo de sus recursos tecnológicos.
"Las expectativas sobre el papel de la ciencia y la tecnología nunca han sido tan altas como lo son hoy ante la necesidad de utilizarlas para solucionar muchos de los desafíos globales", afirmó Kishida. "Nosotros tenemos la gran responsabilidad de responder a las expectativas", concluyó el ministro nipón.