Un encuentro de sociedad civil africana destaca los grandes desafíos de la CumbreRepresentantes de organizaciones sociales comprometidas con los pequeños campesinos, grupos juveniles, pescadores, indígenas, mujeres, trabajadores, ambientalistas, organizaciones de diferentes confesiones, ONG y autoridades locales de 15 países africanos tuvieron una reunión en Nairobi (Kenia) a final de mayo en preparación de la Cumbre de Río+20.
Señalaron que, 20 años después dela Cumbre de la Tierra, estamos más lejos que entonces de alcanzar el desarrollo sostenible. Denunciaron que la población de los países ricos, con unos patrones de consumo insostenibles, consume diez veces más recursos naturales que la población de los países pobres.
El peligro del cambio climático afecta principalmente a las poblaciones más pobres en el Sur, especialmente en Africa, que hicieron poco para generar el problema. En su declaración llaman la atención sobre el principio de la responsabilidad común pero diferenciada, en el sentido de que los países que más contaminan tienen que asumir una mayor responsabilidad; el norte tiene una obligación moral e histórica. También condenan los intentos de Estados poderosos, especialmente del norte, para reducir las obligaciones de derechos humanos y los principios de equidad en el documento final de Río +20 a fin de evitar compromisos concretos para reformas significativas en las políticas sociales, económicas y ambientales. Reclaman que el marco institucional que resulte de Río+20 tiene que integrar los tres pilares del desarrollo sostenible, poniendo especial énfasis en la equidad social e incluyendo un cuarto pilar de gobernanza.
Alertan del peligro de que el concepto de economía verde sea secuestrado por los intereses de las grandes corporaciones multinacionales. Si no se tienen en cuenta los derechos humanos, la justicia social, la equidad y el buen gobierno, la agenda de la economía verde servirá exclusivamente a los intereses de los ricos en lugar de servir para luchar contra la pobreza y atender los desafíos de la sostenibilidad.
En su reflexión también señalan que el borrador de declaración de Río+20 ha dado mucha importancia al rol de la tecnología para alcanzar la sostenibilidad, con un enfoque de arriba hacia abajo; reclaman la necesidad de enfoques más holísticos y participativos, construidos de abajo hacia arriba.
En el ámbito de la agricultura y la seguridad alimentaria, su opción es la agricultura sostenible de pequeña escala frente a la agricultura industrial que tantos impactos negativos ha tenido en los últimos años, desde un punto de vista social y ambiental; en este sentido apuestan por un marco de soberanía alimentaria como la vía más idónea para garantizar el derecho a la alimentación.
El resultado de Río+20 tiene que servir al conjunto de la humanidad, no a los intereses de unos pocos, y debe basarse en los principios de la Agenda 21 y en los derechos humanos.Accede al texto completo de la declaración final (en castellano)