A pesar de una ley promulgada en el año 2005 para mejorar la situación de los más vulnerables, muchos habitantes de zonas rurales de la India siguen sufriendo la pobreza extremaLa duras condiciones del mundo rural en la India ha supuesto que desde los años 90 más de 270.000 agricultores se hayan suicidado y, sin llegar a ese extremo, entre 30 y 50 millones de indios se hayan visto obligados a emigrar a la ciudad para poder sobrevivir. Las fuertes sequías y las tierras en manos de terratenientes con una nula preocupación por los más desfavorecidos ha supuesto que millones de personas ya no puedan vivir del campo. Estas emigraciones suponen un grave problema social; las mujeres que se quedan solas son más vulnerables a sufrir cualquier tipo de abusos.
Esta realidad supuso que el año 2005 el Gobierno del país pusiera en marcha la Ley Nacional de Garantía de Empleo Rural Mahatma Gandhi (MGNREGA) que pretende que se cumpla el derecho al trabajo recogido en la Constitución. Esta ley proporcionaba la garantía legal de 100 días de trabajo al año a los miembros adultos de cualquier hogar rural con un trabajo no cualificado de obras públicas (en el año 2011 los días efectivos de trabajo ascendieron a 180). Esta medida va dirigida hacia los habitantes más pobres de las zonas rurales y pretende también crear bienes públicos en las áreas rurales, como carreteras o depósitos de agua. La Ley MGNREGA ha implicado importantes avances como han sido limitar los flujos migratorios del campo a las áreas urbanas, la inclusión de los más pobres, la regeneración de los bienes comunitarios, la igualdad de género y un mayor activismo de la sociedad civil.
A pesar del efecto enormemente positivo de esta ley sigue siendo una medida insuficiente ya que no ataca al problema de raíz. Los analistas han considerado que las obras que se llevan a cabo no son realmente productivas y la corrupción y la falta de transparencia en la financiación impide que la ley llegue a ser más beneficiosa. Desde hace años el número de personas dedicadas al campo en el país ha ido descendiendo fuertemente, muchas otras han contraído grandes deudas y las que han emigrado a la ciudad viven por debajo del umbral de la pobreza en las zonas más deprimidas. Esta ley está suponiendo una mejora de vida para las personas que se dedican al campo pero es necesario un esfuerzo mayor ya que el índice de pobreza en el país sigue siendo muy pronunciado y las personas que viven en las zonas rurales son las más perjudicadas.