Noticias

Las ciudades y su papel para afrontar los desafíos alimentarios

Las ciudades se están convirtiendo en agentes poderosos en el mundo de la alimentación y están encontrando formas innovadoras de poner en marcha políticas que enfrentan desafíos en los sistemas alimentarios mundiales
detalle de la portada del informe

Según las Naciones Unidas, el 54% de la población mundial vivía en zonas urbanas en 2016. Y se prevé que esta cifra aumente hasta el 66% para 2050. Las ciudades desempeñarán un papel cada vez más importante al abordar los desafíos asociados con los sistemas alimentarios mundiales, como garantizar el acceso a alimentos decentes y nutritivos para todos, mitigar el cambio climático, combatir la epidemia de obesidad, proteger los medios de vida rurales y construir infraestructura y resiliencia.

El nuevo informe del Panel Internacional de Expertos en Sistemas Alimentarios Sostenibles extrae lecciones de las formas en que cinco ciudades de todo el mundo han desarrollado políticas alimentarias urbanas.

El enfoque de Belo Horizonte (Brasil) fue una de las primeras políticas integradas de seguridad alimentaria en el mundo; la agencia dedicada a la alimentación dentro del gobierno de la ciudad ha sobrevivido durante más de 20 años.

La Ley de Promoción y Regulación de la Agricultura Urbana de Nairobi (Kenia) representa un cambio radical en la oposición a la agricultura urbana por parte de las autoridades de la ciudad. La legislación de 2015 surgió a partir de la promoción de la sociedad civil y una ventana de oportunidad abierta por la reforma constitucional en Kenia.

El enfoque de Amsterdam (Holanda) para el Peso Saludable requiere que todos los departamentos del gobierno de la ciudad contribuyan a abordar las causas estructurales de la obesidad infantil a través de sus políticas, planes y trabajo diario.

El Plan de Agricultura y Alimentación Golden Horseshoe (Canadá) implicó el establecimiento de un órgano de gobierno innovador para promover la colaboración entre los gobiernos locales dentro de una región urbana y otras organizaciones interesadas en la economía de la alimentación y la agricultura.

La Ordenanza de Agricultura Urbana de Detroit (Estados Unidos) exigía que la ciudad negociara los marcos legislativos estatales para tener la autoridad de regular y apoyar la agricultura urbana, una actividad floreciente en la ciudad.

Aunque todas estas políticas se desarrollaron en contextos muy diferentes, los autores del informe identificaron una serie de factores que, una y otra vez, fueron integrados para impulsar la política. Los casos mostraron que un proceso inclusivo a medida que avanza la política es lo más importante, ayudando a alinear las políticas con las necesidades y creando una amplia base de apoyo para ayudar con la implementación.

Los ejemplos también mostraron que, incluso cuando las políticas se enmarcan inicialmente en torno a un conjunto limitado de prioridades, hay mucho margen para incorporar otros departamentos y ampliar las ambiciones a lo largo del camino. Finalmente se vio que el identificar los poderes políticos precisos que las ciudades pueden aprovechar para abordar los desafíos alimentarios que se presentan, resultó crucial en varios casos. Esto significaba que podían enfocar los recursos en áreas donde el cambio podría lograrse de manera más efectiva y eficiente.